Sobre nosotros
Quiénes somos
Una familia, una pasión, una finca
La Rejaquera-Rilla es una finca gestionada por la familia Moya, una familia profundamente vinculada al campo, a la caza y a la conservación del entorno natural. Con más de 1.300 hectáreas de terreno en plena dehesa andaluza, llevamos generaciones trabajando esta tierra con respeto y dedicación.
Desde el diseño de los puestos hasta la atención personalizada, cada detalle en La Rejaquera-Rilla refleja una forma de vivir la caza tradicional: auténtica, ética y en armonía con el paisaje que nos rodea.
¿Qué nos hace diferentes?
Una finca familiar, gestionada con el alma y profundamente arraigada al entorno. Cada jornada en La Rejaquera – Rilla refleja nuestra forma de entender la caza: ética, cercana y auténtica. Nuestra casa, tu casa.
Gestión familiar con trato directo y personalizado
Finca exclusiva en el corazón de la dehesa
Diversidad de especies y modalidades de caza
Alojamiento de alto nivel en un cortijo único
Conócenos un poco mejor
«Nosotros tiramos el pato totalmente en libertad. Tenemos comederos para que ellos vayan y venga a su libre albedrío.»
Joaquín Moya
«A media mañana se ofrece un taco, que no es si no un aperitivo informal para amenizar la jornada.»
Canal Sur
«Lo principal es un buen perro y, la verdad, no nos podemos quejar: la organización dispone de varios labradores auténticos expertos en el agua.»
Antonio Barrera, cliente
«No hay muchos lugaros en donde cazar patos. Yo vengo de Asturias, con unos amigos de León a pasar el día. Mucho kilometraje pero merece la pena, es para repetir.»
Jesús Cañas, cliente
Nuestra filosofía
Creemos en una forma de cazar respetuosa, regulada y consciente. En La Rejaquera-Rilla, la caza no es solo el lance: es la espera, el entorno, el aprendizaje, la conexión con la naturaleza. Por eso cuidamos cada detalle, desde la organización de las jornadas hasta la experiencia del alojamiento, para que quienes nos visitan vivan algo único y auténtico.
Nuestro equipo
Contamos con un equipo de profesionales experimentados que acompañan cada jornada: guardas, guías, personal de campo y anfitriones que se encargan de que todo esté bajo control. Su conocimiento del terreno, de las especies y de la finca garantiza seguridad, éxito y buena organización.